Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

¡De rodillas solo ante Dios!

¡De rodillas solo ante Dios! es parte del aforismo utilizado por el sacerdote Edwin Román en su tweet del 4 de agosto del presente año.

Ese jueves pasará a la historia de Nicaragua y el mundo, las imágenes de un video que mostraban a monseñor Rolando José Álvarez de rodillas mientras era rodeado por fuerzas policiales armadas circulaban en los principales medios de comunicación del mundo. El video era la prueba de cómo agentes de la Policía Nacional impedían a monseñor Álvarez salir de su residencia, sin orden judicial alguna el sacerdote era víctima de un secuestro policial.

Esa mañana Álvarez con la imagen del Santísimo en mano, salió de la Curia Episcopal para pedir por la paz, el cese del asedio y hostigamiento a la iglesia católica y el país.

De ese video se extrae esta imagen que quedará guardada en la memoria colectiva del país, ante la imposibilidad de salir de la curia monseñor Álvarez se arrodilla dándole la espalda a los oficiales armados,  levanta sus manos al cielo para elevar su plegaria, la imagen es clara, un hombre de paz, empoderado en su hábito religioso, desarmado y con su relicario al pecho desafiaba los fusiles de una dictadura empoderada en la fuerza armada y el abuso de poder.

No había nada que decir monseñor Álvarez lo decía todo a través de esa imagen, la denuncia era clara y el mundo lo supo; el silencio de Álvarez, sus manos desarmadas, sus piernas dobladas en posición del ritual de la oración vencían una vez más a Daniel Ortega y Rosario Murillo, y  Álvarez emitía su sentencia: él no estaba doblegado por el temor porque su fe siempre esta de ¡rodillas ante Dios y de pie ante los hombres» como bien lo señalaba el padre en exilio Edwin Román.

Vea también: Corazones incendiados en el dolor de la sangre de Cristo

De enero a febrero del año 2022,  el régimen sandinista recordando viejas estrategias ochenteras ha golpeado fuertemente a la iglesia católica, por ejemplo, expulsó del país al nuncio apostólico Waldemar Stanislaw Sommertag, ha encarcelado  seis sacerdotes y un diacono, ha cerrado al menos 10 radioemisoras católicas, sacó de la programación de televisión por suscripción a tres canales católicos, ingreso por la fuerza para allanar y expulsar a 16 monjas de las misioneras de la orden Madre Teresa de Calcuta.

Vea también: Semana Santa: la dolorosa pasión de Nicaragua

La Policía Nacional, el Instituto de telecomunicaciones (TELCOR) y agentes de Migración y Extranjería han sido los brazos ejecutores de tales atropellos.